Cambios en mi estación de radio.

Son varios los motivos que me han llevado a deshacerme de mi cuarto de radio y muchos me preguntan el por qué. Harta de dar explicaciones resumo en varios puntos los motivos por los que dejé en enero la radio y a fecha de hoy sigo sin intención de encender filamentos.

 

1. Hartazgo generalizado de ver tanta gente estúpida que mete las narices donde no les llama y opinan sin saber.

 

2. Hartazgo de aguantar chismorreos que ni me van ni me vienen.

 

3. Hartazgo de ser el blanco de un puñado de psicópatas que no no me dejan en paz, dañando mi honra sacando chismes y controlando mis pasos.

 

4. Hartazgo por ver tanta morralla por frecuencia, interferencias, payasos, portadoras, monos y demás fauna parasitaria.

 

5. Hartazgo de ver que las Administraciones no dan respuestas a mis necesidades como operadora con una normativa clara.

 

6. Hartazgo de luchar por algo que ni me aporta nigún tipo de beneficio personal y no es ni agradecido ni pagado.

 

7. Hartazgo de problemas con mi familia porque ellos no compartían mi interés.

 

8 Hartazgo de estar horas y horas en frecuencia y no conseguir los contactos que buscaba.

 

9. Hartazgo por saturación de escuchar una vez y otra sobre el mismo tema, sobre de la misma gente (como si no hubiera nadie ni nada más en este planeta).

 

10. En definitivamente, harta de perder el tiempo, dinero y un espacio en mi mesa de trabajo con un montón de trastos inútiles.

 

Ahora, con la mitad de la estación vendida o en el contenedor, la otra media se quedará metida en cajas a salvo del polvo debajo de mi mesa de trabajo hasta que un día tenga mi propia casa y tengan un sitio más apropiado y digno en el trastero.

 

Tan solo me hace falta echar abajo la antena Tagra que preside el tejado de mi QTH. No descarto desquitarme y tumbarla a ritmo de Shinji o de Napalm Death (dependiendo de como me levante un día de estos), desmontarla y guardarla en una de las tantas fundas porta antenas que tengo y ahí que vea pasar el devenir de la historia.

 

A todos los que me han hecho dejar la radio GRACIAS por hacerme ver que este hobby es una pérdida de tiempo y que soy más útil en otros menesteres.

 

No es una decisión de hace un momento, sino que desde Enero ya la estoy llevando a cabo dejando mis intervenciones sobre radio a la palabra escrita y a la teoría, que practiquen otros con más tiempo y dinero que malgastar.